Barcelona, 7 ene (EFE).- La dirección y el comité de empresa de Nissan en Barcelona han acordado hoy el contenido y el calendario de las reuniones que mantendrán en las próximas semanas para tratar de llegar a un acuerdo que evite de nuevo la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
Empresa y sindicatos se han vuelto a ver las caras tras las vacaciones de Navidad para abrir la mesa de negociación y concretar la fecha de las próximas reuniones y los temas que se discutirán, según han explicado a Efe fuentes sindicales.
Ambas partes han decidido que lo primero que abordarán será el plan de futuro de la empresa y cuestiones como la producción, la adjudicación de nuevos productos o la previsión de inversiones en las plantas de Zona Franca y Montcada i Reixac (Barcelona).
Posteriormente hablarán de las necesidades de plantilla de la multinacional, la cuestión más delicada del proceso, ya que la empresa mantiene que tiene un excedente de 1.680 trabajadores, mientras que el comité considera que la actual crisis es temporal y requiere, por tanto, de medidas coyunturales.
Sobre el futuro de las plantas catalanas, empresa y sindicatos discutirán, en un principio, los días 15, 19 y 26 de enero por la mañana. Cuando terminen esta ronda de contactos establecerán un nuevo calendario de reuniones.
El de hoy es el primer encuentro que la dirección y el comité de Nissan mantienen después de que ambas partes pactaran, a principios de diciembre, convertir el ERE para despedir a 1.680 personas en temporal, de manera que afectara a un máximo de 3.500 empleados durante algo más de tres meses, desde mediados de diciembre hasta el 31 de marzo, de forma rotatoria.
El acuerdo supuso el fin de un conflicto laboral que duraba ya más de dos meses y la apertura de un proceso de diálogo entre ambas partes para abordar el plan de futuro de la empresa y las necesidades reales de plantilla.
Así pues, el pacto, propiciado por la consellera de Trabajo, Mar Serna, permitirá a partir de ahora y durante un plazo de tres meses abordar con más calma estas cuestiones y hallar soluciones consensuadas sobre qué medidas son necesarias aplicar para adaptar la plantilla a la demanda y en qué condiciones.
Los sindicatos ven a la compañía más predispuesta a negociar en esta nueva etapa y confían en llegar a un acuerdo que garantice la continuidad de la planta catalana y un ajuste pactado de la plantilla.
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